martes, abril 12, 2005

Corto 2: De cuando el ingeniero Cajal se hizo invisible

Lo había buscado durante toda su vida. Esa tarde de abril lo logró. Volvía de su trabajo, parado en el 47, rumbo a su casa en Chacarita, sacudiéndose por el vaivén de la adoquinada Nogoyá. Diez pasajeros consultaban sus mensajes de texto, tres leían el diario, otros tantos miraban por la ventanilla y cuatro dormitaban. El ingeniero Cajal- justo cuando el 47 pasa frente a la cárcel de Devoto- fue invisible por 57 segundos. Luego, volvió a su estado natural.

4 Comments:

Blogger Ruth said...

Sus viejos fans tenían razón, usted no nos puede hacer la traidora jugarreta de cerrar el blog. No puede, ¿me entiende?

6:00 p. m.  
Blogger Coxon said...

No hay caso... usted cuando vuelve lo hace de maneras exquisitas.

6:05 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

muy bueno. lo dice un experto... quien yo? no. jejeje otro que lei por alli.

7:57 p. m.  
Blogger Ling said...

¿Fue el ingeniero feliz en esos segundos? ¿O es tema de otro cuento?

6:57 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home